Cada vez que leo en un diario o una revista sobre el «fenómeno de los blogs» vuelvo a pensar que esos artículos están condenados al fracaso: a los que visitan o escriben blogs no les aportan nada nuevo (salvo ver su nombre impreso y escribir un post recomendando el artículo) y a aquellos que no saben de qué se trata, no logran seducirlos. Pienso que la pregunta principal para estos últimos nunca queda del todo respondida: ¿por qué son tan geniales los blogs?
Hoy a la mañana, por tres carriles diferentes, me llegaron ejemplos de «blogs en acción». Los blogs no tienen necesariamente que tener una función, pero en este caso hubo tres posts que están transformando la realidad con la palabra.
El primer caso es el de Daniel K., que decidió responder a la repugnante campaña de McDonald’s a favor del egoísmo
En su blog dice:
Por décadas la publicidad ha operado como un sistema despótico que se permite envíarnos toooooodo tipo de mensajes sin dejarnos lugar alguno para responder. En una democracia todos deberían tener derecho a la palabra, y creo que la relación publicidad-ciudadano no tiene porque ser la excepción. Y aquí va mi propuesta: contestémosle a McDonald’s. Hagámosle saber que ser egoísta, en realidad, no está bien.
Propone visitar el sitio web de McDonald’s para pedir que la empresa suspenda la campaña y que además demuestre con hechos que «ser generoso está bien» donando $5000 a la fundación «Los carasucias».
McDonald’s contactó al bloguer y en este momento oficia de mediador para que la compañía done el dinero al comedor. Las negociaciones son transparentes, porque Daniel K. va actualizándolas permanentemente en su blog.
El segundo caso se está dando en España a partir del reciente libro de Ignacio Ramonet «Cien horas con Fidel», con conversaciones con Fidel Castro. A partir de un anticipo que ofreció «El País», Arcadi Espada detectó que varias supuestas respuestas en exclusiva de Fidel Castro son, en realidad, un refrito de textos antiguos, ya publicados. El Defensor del Lector del diario español respondió con evasivas la denuncia. Y el resto de los medios prefirió callar el «cut & paste» de Ramonet. Pero los lectores de Espada siguieron trabajando y ya recopilaron un PDF con hasta ahora 51 páginas de textos semejantes.
El tercer caso corresponde al blog Fotonoticias hoy. Darío Villegas saca fotos de eventos públicos y las pone en su sitio, de apenas un mes de vida. En su post de ayer cuenta:
en este corto tiempo, ya me ganè 2 poderosos enemigos, el Ministro de Salud y Ambiente de la Naciòn, Señor Ginès Gonzàlez Garcìa, que hace un par de semanas, por medio de su vocera de prensa Lucrecia Casemajor, me » pidiò » de buena manera pero terminantemente ,que no lo fotografìe màs… que ya tenìan su fotògrafo y que no les gustaba los comentarios que yo agregaba a las imàgenes,( aclaro que nunca le tomè fotografìas bañandose ni tiràndose a la pelopincho,todo lo contrario,solo en actos pùblicos o abiertos a la prensa) por supuesto que no accedì a su pedido, pero lo dejè pasar, hoy, dìa internacional de la LIBERTAD DE PRENSA, fue la gota que rebalzò el vaso…al menos el mìo, por el medio dìa, me dispongo a tomar unas fotografìas al Ministro de Asuntos Exteriores Alemàn Frank Steinmeir, de visita en nuestro paìs, me acerco hasta la Bolsa de Comercio y allì lo espero, a los minutos llega con su comitiva y comienzo a tomar fotografìas, entra a la Bolsa y yo sin dejar de tomar fotos lo sigo, una vez dentro, acompaño a los funcionarios hasta la sala en donde es recibido por el Canciller Taiana y luego al salòn de actos donde lo esperaban empresarios de ambos paìses para agasajarlo con un almuerzo, allì, se les une la Ministra de Economìa Micelli, y yo, compenetrado en mi labor ( tomè màs de 80 imàgenes) me olvidè de acreditarme en la entrada, igualmente, todos me vieron incluìdo el personal de custodios Alemanes, y nadie me preguntò quien era y que hacìa allì, estuve a medio metro del funcionario Alemàn y la Ministra, sin que nadie supiese quien era yo, por supuesto que solo tomaba fotos, pero a la hora de estar allì, y cuando ya todos almorzaban y me disponìa a acreditarme,hicieron la pregunta del millòn, bien,sintetizando, no me acreditaron y se sintieron heridos en su orgullo, (lo entiendo), me invitaron a retirarme…. pero antes, debìa borrar las fotos que habìa tomado, ??… me voy… No, te vas, si borràs las fotos, por lo que tuve que acceder, ahora bien, por que debo pagar por la incompetencia de otros?…¿ no hubiese sido màs fàcil atajarme en la entrada y pedir que presente la correspondiente acreditaciòn… ¡ me olvidaba!, felìz dìa de la LIBERTAD DE PRENSA:
La forma de proceder de Darío puede ser discutible, pero lo que definitivamente es condenable es la amenaza de ¿secuestro? en caso de que se negara a borrar las fotos.
Ninguno de los tres casos está cerrado, pero probablemente sin estos blogs ni siquiera habrían tenido difusión. La red de blogs, los comentarios de los visitantes y la perseverancia de los bloguers se encargarán de llevarlo hasta las últimas consecuencias.